Nuestra Jaima

Aulas del Colegio Mayor Chaminade

CMU Chaminade Aula Nuestra Jaima

Escrito por Nuestra Jaima

Hoy, en el chami habita Nuestra Jaima, heredera de cierta forma, de PUAS, si bien no fue heredera como tal, nació por un camino paralelo: durante el 2015 varixs colegialxs  se reunían prácticamente en la habitación de Brahim, que llamaban entre ellxs “la Jaima”, fueron noches largas de muchos tés y conversaciones, donde confluyeron diferentes ideas, personas y proyectos, entre esas personitas, estaba también Hayedna. Ambos convivían con total normalidad con el resto de colegiales, lo cual fue super nutritivo para el colegio, pero sobre todo, para el nacimiento de Nuestra Jaima, puesto que a raíz de esas reuniones informales surgió la idea de que se convirtiese en un Aula, dónde todxs pudiesen aprender e informarse sobre la causa, aportar sus ideas y propuestas.

Así, Nuestra Jaima lleva 4 años trabajando en conjunto con el colegio y asociaciones externas a él, manteniendo la causa saharaui presente, uniendo a personas de diferentes generaciones (incluidxs excolegialxs), aunque sigue sujeta a altibajos, llena de momentos catárticos, de euforia, pero también de etapas de desánimo. Asimismo, desde el mismo Chami se han organizado viajes a los campamentos (con lxs colegialxs saharauis que había en ese momento), pero también ha participado gente que forma parte del aula en viajes de otras asociaciones, aunque no queremos centrar nuestro trabajo en los viajes, sabemos que es la parte más atractiva del conflicto y no descartamos futuras ocasiones.Mantener viva la llama de una lucha es complicado, pero se torna imposible si ni siquiera conocemos en qué consiste dicha lucha.

La manera de percibir la lucha como más viva era, precisamente, derivando esa convivencia diaria donde un ¿Quién eres? ¿De donde vienes? ¿Qué estudias? se convertía en una interesantísima conversación sobre la población saharaui. Nuestra Jaima es muchas cosas, es un aula, es un grupo, es una suma de personas con las emociones en sintonía, es un puñado de esperanza, es una herencia de comunidad en una sociedad en la que vivir, sentir y luchar no es algo que forme parte del día a día de muchas personas. Asimismo, decidimos que lo mejor que podíamos hacer en el ámbito del cole era informar, difundir, visibilizar. Igual que hace 20, 30, 60 años, los refugiados saharauis continúan siendo invisibles incluso para nosotrxs, el país que lxs abandonó. ¿Qué pasa con lxs desaparecidxs saharauis con carnet español? ¿Qué pasa con lxs cientos de niñxs que siguen naciendo en los campamentos de refugiados aprendiendo hassanía y castellano? ¿Somos realmente feministas si borramos de nuestro análisis a las hermanas saharauis? Tenemos no solo la responsabilidad sino la firme intención de brindar todas las herramientas de concienciación posibles a cada uno de lxs colegialxs que llegan al chami por primera vez.

Muy poco ha cambiado desde aquellos primeros viajes a Tinduf, pero seguimos y seguiremos apoyando hasta que el pueblo saharaui sea verdaderamente libre. Nuestra mayor herramienta es la información y desde el corazón de Madrid, no queremos permitir que la causa caiga en el olvido. El chami siempre fue lugar de movimiento social, de agitación de conciencias y esa, es la herencia que pretendemos recuperar.